HOLA CHINA (HC): ¿Cuándo empezó el interés que te llevó a emigrar a China?
Ives Bejarano (IB): Estuve adjunta al centro de estudios asiáticos que tienen en la Universidad Tecnológica de Bolívar y desde allí empezó de alguna forma todo este interés por entender un poco más qué pasaba en los países asiáticos. Se despertó esta duda, quise estar más de cerca y tuve la oportunidad de irme en una pasantía a Shanghái con la Cámara de Comercio Colombo China.
HC: ¿Trabajaste con esa organización cuando llegaste a China?
IB: Sí, estuve con ellos por un tiempo, estaba encargada de toda la parte de relaciones internacionales y conexiones entre escuelas y universidades de los dos países para fortalecer la parte educativa. Por otro lado, trabajé fortaleciendo las relaciones que tenía la Cámara Colombo China con otros gremios en Shanghái.
HC: ¿En qué año ocurrió ese viaje?
IB: En 2009 estaba en el último semestre y me fui a Shanghái la primera vez, hice la pasantía, volví a Colombia y luego me mudé a China en octubre de 2010.
HC: ¿Cómo se siente una colombiana en Shanghái?
IB: Quizá el impacto más fuerte fue en 2009 cuando llegué. Sentí el cambio cultural, es una vida que va tremendamente rápido en comparación con el ritmo de las cosas en Colombia. China para mí es un país de contrastes, o amas a China o no, no hay puntos medios. Yo tenía la ventaja de que cuando llegué a Shanghái tuve el acompañamiento de la Cámara Colombo China, de alguna forma no me sentí tan sola. El choque cultural no fue tan duro porque desde el primer momento estuvimos acompañados por personas chinas que trabajaban con nosotros y conocían el español.
HC: ¿En qué se diferencia trabajar en China y trabajar en Colombia?
IB: La practicidad es un punto importantísimo. El chino es práctico. Creo que eso caracteriza mucho a la persona que trabaja en China. Si te vas a China tienes que cambiar el chip, eso es muy importante. En Latinoamérica la burocracia, los procesos, hacen que cada paso sea demasiado lento para llegar al punto final. En China todo es muy rápido, es un país de resultados, la producción debe ser inmediata, no hay tiempo. Si trabajas en Colombia sientes que en un día puedes hacer mil cosas, pero en China sientes que el tiempo se desvanece.
HC: ¿Cómo se vincula el profesional chino con un extranjero en el espacio de trabajo?
IB: En principio hay un recelo de la parte china, pero es muy importante que tú demuestres tu capacidad para el trabajo. Ellos están viendo si tienes la practicidad y si puedes dar soluciones a lo que ellos necesitan, eso hará mucho más fácil que te integres. La gente te contrata en China porque necesitan que tú resuelvas algo en específico, así de sencillo. De pronto, nosotros los latinos necesitamos algo de logro pero también somos sentimentalistas, quizá una persona no trabaja tan bien pero es muy querida. En China no es así, alguien te contrata para algo y necesita que funciones.
HC: ¿Tú trabajas con profesionales chinos?
IB: Todos son chinos. Soy la única extranjera en mi oficina. Es una compañía que fabrica contenedores para campamentos mineros y explotaciones petroleras. Yo soy la representante para América Latina. En principio inicié como la persona que los iba a ayudar a abrir un poco el mercado en América Latina y con el tiempo he pasado a ser la representante de área. Estoy con ellos desde 2011. En este momento América Latina ha venido a ser el 33 % del total de ventas de la empresa.
HC: China hoy en día tiene mucho interés en entrar a América Latina, sus políticos participan en reuniones con gobiernos de la región, ¿qué opinas al respecto?
IB: Desde 2009 la política de China está dirigida completamente hacia América Latina. Por eso te digo lo de la practicidad, ¿qué hace una colombiana en una empresa china? Ellos lo tienen muy claro. Necesitan una persona de la región que maneje el idioma y que conozca el mercado latinoamericano.
HC: ¿Qué beneficios tienen los empresarios latinoamericanos a la hora de invertir y comprar en China?
IB: Voy a ser realista. Las ventajas son muy grandes realmente, muy pocos países hacen una política exterior que ofrece tanto a América Latina. Lamentablemente nuestros países latinos, a excepción de Chile, Perú y México, no tienen un gran conocimiento de la política económica china. Nuestros países latinos tienen estudios incipientes sobre China si los comparamos con los estudios que hacen en China sobre nosotros. Los empresarios latinoamericanos estamos perdiendo muchas oportunidades porque no sabemos cómo hacer negocios con los chinos y eso en cualquier forma te va a colocar en desventaja.
HC: ¿Cómo se debería negociar con China?, ¿cuál es la particularidad de la cultura económica china?
IB: Nuestras balanzas comerciales hablan por sí solas. Es una verdad que la mayoría de los países están en desventaja con respecto a China, nosotros en América nos hemos ido acercando mucho más a China, pero simplemente hemos convertido a China en una bodega. Entonces, una de las primeras cosas que yo te puedo mencionar es cómo los latinos vemos a China, hay una visión de que es una bodega para comprar productos de bajo valor y con una calidad aceptable.
HC: ¿Los países desaprovechan sus relaciones con China?
IB: Sí, a excepción de casos excepcionales como lo ha hecho Chile o Perú, pero en el resto de los países sigue habiendo una diferencia grandísima entre lo que nosotros importamos de ellos y lo que ellos importan de nosotros.
HC: ¿China es un mercado que sería receptivo a productos latinoamericanos?, ¿hay posibilidad de competir con un industrial chino en su territorio?, ¿hay posibilidad de que un latinoamericano comercie sus productos?
IB: Sí, hoy en día tú puedes encontrar muchas compañías que están entrando al mercado chino, compañías latinas, pero hay algo que es cierto, China tiene mayor capacidad productiva, esa es una realidad que no podemos negar. Sí hay un mercado muy grande que sigue creciendo, el cual es el de clase media y clase alta, ese está todavía necesitado de productos y desea consumir.
HC: ¿Cuáles son los riesgos de invertir en China?
IB: Para invertir en China necesitas ir de la mano con un chino, aunque están abiertos al mundo también son bastante proteccionistas, no es lo mismo cuando llegas solo al mercado que cuando cuentas con el respaldo de un chino. Otro riesgo es no entender la burocracia, o no saber cómo seguir paso a paso los requerimientos para entrar al mercado chino, eso definitivamente te puede hacer perder la inversión en menos de lo que tú esperas. ¿Entras a China a qué?, ¿a qué nicho de mercado?, ¿realmente qué tanto te puedes expandir? Ese es el tipo de preguntas que la gente debe hacer antes de invertir porque si no el mercado chino te come vivo.
HC: ¿Qué nicho de mercado recomiendas para ingresar en China?
IB: Desde mi punto de vista lo mejor que nosotros podemos brindar es servicios. China es un país productivo, entonces ellos saben cómo abrir una fábrica y cómo hacer la máxima cantidad posible para vender, pero muchas veces puedes apoyarlos para que ese producto llegue a otra parte. Ahí hay una oportunidad.
HC: ¿Deseas quedarte en China permanentemente?
IB: No, yo seguiré trabajando por muchos años con China pero no en China, porque he decido que empezaré a trabajar desde el otro lado para tratar de mirar desde América Latina qué vamos a vender a China.