Por Karla Rubio Bejarano*
Al comienzo de la década de los 90, se mostro un culto muy elevado hacia la moda y la estética. Los looks estaban basados en cabellos con mucho volumen, en maquillajes muy marcados, accesorios llamativos y exuberantes e indumentarias muy femeninas.
Algunas mujeres estaban agobiadas por las exigencias de las grades y poderosas ¨mujeres empresarias¨ y comenzaron a pensar que para tener un buen look debían ser altas, esbeltas y seductoras. En dicha época hubo una fuerte crisis que no pudo ofrecer mucho hacia la moda, por lo cual fueron dejando a un lado a las empresas de textil y a las supermodelos ya que estas resultaban para ese entonces muy costosas.
Pronto comenzó a surgir una contracorriente, había arribado el Grunge, que mostraba un fenómeno anti moda, con mujeres mal vestidas y muy mal combinadas. Este movimiento duro poco, sin embrago el desconstructivismo perduro en la moda. La moda se volvió casual, las personas se cansaron de la producción y decidieron entrar en un tiempo de relajación, es por esta razón que dicha moda es muy característica y se puede identificar con tanta claridad. Sin embargo, esta basaba en la variedad y no en una tendencia específica y duradera.
Luego de esto, la frescura natural llego a la moda, las mujeres debían lucir tan naturales como cuando recién salían de la ducha. Fue una década donde las mujeres modernas e independientes deseaban expresarse con libertad e individualidad. Después de muchos años de tendencias y modas, la gente llego a la conclusión de que no se estaban expresando con libertad. Las personas comenzaron a cortarse el cabello con un look famoso que impuso ¨Mary Quant¨, el cual consistía en un peinado ¨champiñón¨, así como lo usaban los Beatles y mientras más cómodas y confortables se sentían, mucho mejor se sentían.
En conclusión, la moda en los 90 no estuvo caracterizada por un estilo específico, sino más bien se definió como un impulso de las personas por marcas su individualidad a través de la ropa. A esto se le sumaria el aporte de algunas tendencias musicales, la naturaleza y los tatuajes. Lo que si está claro, es que en estos años se dejo atrás la atmosfera de los 80, típicamente fastuosa y exuberante, para dar paso a la simplicidad y a la comodidad.
¨La moda reivindica el derecho individual de valorizar lo efímero.¨ , Coco Chanel.
*Graduada en diseño de modas en el Instituto de Diseño Valencia (estado Carabobo, Venezuela). Tiene experiencia en diseño de trajes de fantasía y participó como jurado junto con otros diseñadores a la hora de la elección del mejor traje con motivo de objetos reciclables. Actualmente tiene su propia firma, Ópalo, dedicado al diseño y confección de trajes de baño.
